Cada 21 de junio, en las poblaciones, se celebraba el AÑO NUEVO ANDINO. Coincide con el solsticio, o
sea el retorno del sol después de su alejamiento máximo. En Cusco, se hacía la
ceremonia de amarrar en un monolito, llamado Intihuatana. Para las culturas
prehispánicas, Lupaka, Tiahuanacu e Inca, desde hace 5521 años, el 21 de junio,
se inicia con la nueva campaña agrícola. El Sol o Inti, con su retorno, empieza
a irradiar y fecundar a la Pachamama o Tierra Madre.
Hoy con un acontecimiento muy representativo nuestra I.E. revaloro
esta fecha, con una actividad de un festival de comida andina, los estudiantes
compartieron los diversos platos típicos
mostrados en esta actividad, y en el
nivel secundario presentaron a través de una exposición platos como , Capun
gallo, p’esque, Sara Jank’a, k’ispiño, entre otros.